Por Juan Tomás Valenzuela
Y fracasó el conversáo
que pretendía el presidente,
entre Maduro, su gente
y ese pueblo revolteáo.
La oposición se ha cerráo
contra Nicolás Maduro,
y le han puesto hasta carburo,
a ver si llega a pudrirse,
para ellos poder subirse
al palacio sin apuro.
Maduro tiene un dilema
con los de la oposición
y ha buscado de anfitrión,
pa’ que resuelva el problema
al matatán del sistema,
Al semi-dios, al ungido,
al ser más comprometido
con la paz y la justicia,
el mismo que buscó a Alicia
para que entierre a Diandino.
Leonel, fue el que se inventó
el conversáo con los chamos,
y Danilo, por tras mano,
vino y lo destituyó.
El hombre se combinó
con Maduro y Zapatero
y urdieron un plan certero,
dejando fuera a Leonel,
pa’ tratar de resolver
el lío con los caraqueros.
El plan que tenía Medina
con la paz de Venezuela,
era cercar su parcela
a punta de carabina,
para que tóa sus bocinas,
de una manera eficaz,
lo vendan como el audáz
que pudo reconciliarlos
y así poder postularlo
al Premio Nobel de Paz.
8 febrero 2018